• La persona suicida vive mucha ambivalencia: no quiere realmente morir. Ver Mito: las personas suicidas están claramente decididas a morir.
  • No lo hace por elección, si no por falta de opciones. Tiene la percepción de que no hay soluciones a su problema.
  • Esta ambivalencia no debe interpretarse como una falta de seriedad en sus intenciones. Es una característica del proceso suicida.